¡Qué color controversial el amarillo! Es un color al que se le suele tener miedo tanto para lo que es decoración como inclusive para lo que es moda. Rara vez es tendencia el amarillo, sin embargo, bien combinado es el color que genera mayor equilibrio en una composición.

No hay que caer en el error de que por querer usar el amarillo se salga corriendo a pintar las paredes de “amarillo pollito”, no es la idea bajo ningún punto.
Este color puede ser un gran aliado para darle luminosidad a cualquier ambiente, genera armonía y refleja la entrada de luz natural.


Al tratarse de un color con mucha personalidad hay dos opciones para usarlo. Una es utilizarlo en pequeñas proporciones en varios objetos clave de la ambientación. Para este caso podemos elegir, o bien una pared pintada o empapelada, almohadones, objetos decorativos, tapicería, etc.
La segunda opción es tomarlo como referencia y convertirlo en el eje de nuestra decó. Esta opción me parece que queda super divertida y da carácter a cualquier casa. Podemos aprovechar y pintar todas sillas diferentes en este mismo tono, o por qué no jugar con todos los textiles de la casa. En este caso está permitido ser “obvio” y saturar los espacios con objetos en este color. Seguro que más de una persona se anima a usarlo!


Muchas veces sucede que un espacio resulta apagado y triste, probar con toques de este color genera alegría y levanta cualquier ambiente. ¿Por qué? Porque además de ser luminoso es un color que desprende felicidad, es el color de sol y de las caritas felices 🙂
Hay que animarse a combinarlo con la paleta de colores que hayamos elegido. Tanto sea que en nuestra ambientación predominen los neutros como si el resto de los colores tenga fuerza por sí mismos. Que el espacio quede o no equilibrado dependerá en todo caso de la proporción en que utilicemos al amarillo y también de la tonalidad del mismo.


Hay amarillos más claros (con más blanco en su composición misma), amarillos intensos, y amarillos más apagados. Una gama amplia que permite generar armonía y luminosidad sin perder el estilo que se le haya querido dar a la ambientación.

¡Ojalá se animen a usar este color tan alegre y versátil!
¡Un beso enorme enorme y hasta la próxima!
El problema es que aqui tiene fama de que mala suerte
Es verdad!!! ese es el problema
Era para mi un color que no existia, y la verdad desde que empezamos a verlo en la decoración, me encantó! Y no creo en la mala suerte!!
¡¡¡Sí!!! Lo importante es la energía que le ponga cada uno, ¡Fuera mala suerte!